La publicidad nativa, o marketing nativo, funciona de manera similar a otras formas de publicidad digital, creando una relación mutuamente beneficiosa entre editores y anunciantes. Los editores que buscan monetizar sus activos digitales venden espacio publicitario. Los anunciantes interesados en conectarse y vender productos a la audiencia dedicada de un editor pueden comprar ese espacio publicitario.
Las ubicaciones de anuncios nativos generalmente se venden de dos maneras: a través de plataformas publicitarias programáticas o mediante acuerdos directos. Cada uno ofrece beneficios únicos; los anunciantes y editores pueden preferir utilizar un método o una combinación de ambos según su industria, público objetivo, objetivos de campaña y estrategias.